“Ay Dios por eso me mantengo…Que no me cambien la emisora… Ay Dios por eso me mantengo…” ese es el coro y el pregón de
Abdel Rasalps en la mas reciente producción de
Van Van "Arrasando"... donde con una excelente interpretación nos regala el disco
Me mantengo.
Y es un pregón muy acorde para esta Cali Caribe donde la radio comercial enceguese los oidos y les priva de lo que día a día produce el ambiente latino en todo este pequeño planeta azul. Gracias a Dios tenemos a las emisoras universitarias,
Univalle Stereo y
Javeriana Stereo, donde lejos de la tentación de la payola suena la música con sabor de los cuatro puntos cardinales, generando un espacio que hace falta ampliarlo para que cada vez mas Caleños se dejen tentar y atraer por la salsa del siglo XXI; por eso no me cambien la emisora dejenme a
Salsa Magistral,
La Sala Ayer y Hoy,
Sonido Urbano, y todos esos programa que exploran e investigan en baúles reales y virtuales las mas escondidas melodías para que nosotros las disfrutemos. Y que no se nos olvide
La Raza latina de Gary Domínguez con la que crecimos musicalmente.
Como un homenaje a todos esos programas, este pequeño texto del escritor colombiano
John Jairo Junieles.
EL BÚHOEl celador dormita con la radio pegada al oído. El locutor está hablando sobre el bolero y cada cierto tiempo hace preguntas sobre el tema. El celador se las sabe todas pero no puede moverse de su puesto y llamar por teléfono. Los supervisores pueden llegar en cualquier momento y no quiere ganarse una sanción por un premio tan exiguo como los que ofrece el locutor.
Es una emisora pobre, los patrocinadores no dan gran cosa pero la música es buena. Él tiene doce años de trabajar como celador y tres cuidando la fachada de aquella empresa. Todo el día pasa durmiendo y a las ocho vuelve a trabajar.
Las noches serían insoportables sino fuera por la radio, con ella el tiempo se desvanece en forma de música. A las ocho de la mañana entrega el turno.