Por eso esta Feria se ha denominado la "Feria de la Solidaridad y la Esperanza".
Por eso para entrar a todos los eventos no se exige boletas, (pero para los sitios VIP si son costosas) la entrada es gratis, solamente se tienen que llevar alimentos para los damnificados del invierno, y luego se nos pone un sello en el brazo para el ingreso. Acalibre extendió su mano libre y a pesar que no logramos entrar ni sentarnos en la tribuna hicimos nuestra contribución.
El ingreso después del medio día era imposible, Cali acudió en masa para ver a los que representan el latir de su corazón, mas de mil bailarines esperaban paltitantes para salir a escena.
Los Moteles no recibián a los amantes furtivos esta vez; sus puertas se abrieron para los que quisieran ver el paso de las carrozas con sus músicos y bailarines.
Osman Arias, el eterno y mítico Dj, ahora en ese mítico sitio salsero llamado Zaperoco, estaba al comando de una de las estaciones de las comparsas, cual super héroe animado.
Gary Domínguez ultimaba detalles antes de la aparición de las bandas, de los bailarines, de la esquizofrenia colectiva.
Todo estaba listo, la lluvia hizo su tregua, las tribunas completamente llenas, el asfalto esperando llenarse de color, de sabor y de rumba.
Y empezó..... Los primeros en salir los que nos enseñaron a todos nosotros La Vieja Guardia, de allí en adelante todo fue euforia salsera.