SI ME OLVIDAS - PABLO NERUDA

Hace un par de días, me encontré en el "feisbu" con Jenny Villa, y casualmente había publicado un fragmento de un poema que llevaba varios días tarareando y queriendo recordar. Jenny me recordó el poema pero también me trajo muchos recuerdos de mi niñez, de mi quinto de primaria cuando compartimos un recodo de esta vida, que a veces se siente corta, y a veces se siente larga; recordé también que en esta Cali Caribe se oía por esos días en las esquinas del barrio Mi Fruto de Louie Ramírez, vocalizando Ray de la Paz, no sabía en ese momento quien era Louie Ramírez, ni mucho menos que era un genio.

Luego de terminar la primaría, cada uno tomó rumbos diferentes, bueno nos hicieron tomar rumbos diferentes, dificilmente podríamos controlar nuestras inocentes existencias a los 10 años de edad, y quizá nos encontramos unas dos veces mas en la vida, hasta que publicó este atómico poema de Pablo Neruda, que les dejo aquí abajito; y mas abajito, el disco Mi fruto, de la voz de Ray de la Paz con la Orquesta del Solar, dos cosas inconexas, pero que el tiempo logró ponerlas en un mismo post.
SI ME OLVIDAS

Quiero que sepas
una cosa.

Tú sabes cómo es esto:
si miro
la luna de cristal, la rama roja
del lento otoño en mi ventana,
si toco
junto al fuego
la impalpable ceniza
o el arrugado cuerpo de la leña,
todo me lleva a ti,
como si todo lo que existe,
aromas, luz, metales,
fueran pequeños barcos que navegan
hacia las islas tuyas que me aguardan.

Ahora bien,
si poco a poco dejas de quererme
dejaré de quererte poco a poco.

Si de pronto
me olvidas
no me busques,
que ya te habré olvidado.

Si consideras largo y loco
el viento de banderas
que pasa por mi vida
y te decides
a dejarme a la orilla
del corazón en que tengo raíces,
piensa
que en ese día,
a esa hora
levantaré los brazos
y saldrán mis raíces
a buscar otra tierra.

Pero
si cada día,
cada hora
sientes que a mí estás destinada
con dulzura implacable.
Si cada día sube
una flor a tus labios a buscarme,
ay amor mío, ay mía,
en mí todo ese fuego se repite,
en mí nada se apaga ni se olvida,
mi amor se nutre de tu amor, amada,
y mientras vivas estará en tus brazos
sin salir de los míos.